En una carta del 8 de agosto difundida el martes, el inspector general Joseph Cuffari comunicó a los líderes de las comisiones de Supervisión y de Seguridad Nacional de la Cámara de Representantes que su oficina no cumplirá con sus solicitudes de documentos internos y entrevistas debido a la investigación penal en curso sobre los mensajes de texto borrados del Servicio Secreto.
En respuesta, la presidenta de la comisión de Supervisión, Carolyn Maloney, y el presidente de la comisión de Seguridad Nacional, Bennie Thompson, enviaron una carta el martes exigiendo a Cuffari que entregue los documentos y ponga a su personal a disposición de los legisladores o se arriesgará a recibir una citación del Congreso.
“Su obstrucción a las investigaciones de las comisiones es inaceptable, y sus justificaciones para este incumplimiento parecen reflejar una incomprensión fundamental de la autoridad del Congreso y de sus deberes como inspector general”, escribieron Maloney y Thompson en la carta.
“Si continúa negándose a cumplir con nuestras solicitudes, no tendremos más remedio que considerar medidas alternativas para garantizar su cumplimiento”, escribieron.