Miguel es el propietario de dos de los restaurantes a los que se les negó la licencia para operar al aire libre, lo cual significa que a partir de diciembre, tendrá que retirar las mesas y sillas de sus terrazas y atender a los clientes dentro del local.
De los 144 negocios que solicitaron renovar las licencias para tener mesas afuera, a 13 les fueron denegadas, todos ubicados en el área de Lincoln Road y Ocean Drive. Esto originó protestas en el ayuntamiento de la ciudad.
Alex Fernández, nuevo comisionado de Miami Beach, explicó que las violaciones pueden ser de muchos tipos e incluyen infracciones al código de la ciudad, niveles de la música alta, o insistir de forma intempestiva para que los clientes coman en el local.
Los dueños de este local insisten en que las violaciones que cometieron no son graves y ya fueron desestimadas en la corte, por lo solo quieren hablar con las autoridades de la ciudad para arreglar el problema.
FUENTE: Adriana Navarro | americateve.com