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Aunque la integración de la tecnología moderna como los chips y las tarjetas digitales -que permiten efectuar pagos con solo acercar la tarjeta al terminal-, así como el desarrollo de la inteligencia artificial, han contribuido a que los casos de robo de identidad hayan disminuido, todavía una de cada cinco personas que solicitan los informes de crédito por posible robo, una es posible víctima.
“Los pagos digitales, la inteligencia artificial y los chips son mucho más seguros y evitan en gran medida el riesgo al robo de identidad. No existe una estadística específica sobre los casos de robo de identidad en la Isla, pero a base de los que solicitan los informes de crédito por posible robo, de cada cinco personas, una es posible víctima”, detalló Rodney Curbelo, gerente general de TransUnion Puerto Rico.
El “2019 Digital & Mobile Behavioral Study” de la Asociación de Ejecutivos de Ventas y Mercadeo de Puerto Rico (SME, en inglés) estipula que en Puerto Rico sobre un millón de personas hicieron uso del comercio digital, lo que elevó la participación de 41% a 43% al compararse con el año previo.
Ante la diversidad de esquemas de robo de identidad y la proliferación de casos registrados en Puerto Rico y el Caribe, empresas locales e internacionales han incrementado sus herramientas de seguridad informática para salvaguardar de manera más eficiente la información personal de sus clientes.
Por su parte, Eduardo Pérez, vicepresidente senior de seguridad de pagos para Visa en América Latina y el Caribe, aseguró que la empresa ha realizado varias inversiones en innovación y estrategias de seguridad para proteger la identidad de sus clientes y disminuir el riesgo del fraude al plástico.
“Las tarjetas sin contacto usan la misma tecnología de chip y la misma seguridad ya probada contra el fraude. A medida que caduquen las tarjetas de pago con banda magnética y se reemplacen, se espera que el fraude relacionado con los pagos efectuados en persona disminuya aún más en el próximo año”, mencionó el ejecutivo.
Pérez explicó, además, que para este año 2020 prevén más de 20 mil millones de dispositivos conectados a Internet, por lo que el volumen de los pagos digitales -que mantiene una tendencia de incremento- continúe aumentando. “Necesitamos una defensa como el chip para proporcionar más seguridad en el canal digital.”
Aclaró que la tokenización -herramienta utilizada para evitar que lleguen a duplicar la información de un titular a nivel digital u online, algo similar al chip en la tarjeta de crédito/débito física- puede proporcionar esa solución y a medida que el comercio continúa creciendo, esperan que más comercios se sumen a esa iniciativa.
La demanda de comercio electrónico en Latinoamérica y el Caribe aumentó de 126 millones de personas en 2016 a 156 millones en 2019. Asimismo, las ventas realizadas por Internet -en la misma región- se elevaron de $40 mil millones en 2016 a $80 mil millones en 2019; un aumento de 50% en tres años.
Pérez sostuvo que los tokens son cruciales para mantener protegida la información de las tarjetas en los sistemas en línea. Esta tecnología reemplaza los datos con un número alternativo de 16 dígitos. En el caso de un robo, los estafadores solo podrían tener acceso al token en lugar de la información de pago del consumidor.
La empresa MasterCard también utiliza esta y otras tecnologías de autenticación para mejorar la seguridad de los pagos en línea. Además, se han asociado con bancos y el sector de servicios financieros para acelerar la adopción de los últimos estándares de seguridad.
Se dispara el comercio electrónico
“El comercio electrónico está despegando a un ritmo destacable con un crecimiento anual de entre 25% a 30% y buscamos aumentar esta tasa de crecimiento con una serie de iniciativas que nos llevan a simplificar y hacer más segura la transacción. El robo de identidad se está convirtiendo en uno de nuestros principales retos”, sentenció Patricio Hernández, vicepresidente de soluciones de seguridad de Mastercard en Latinoamérica y el Caribe, en entrevista previa con EL VOCERO.
Hernández destacó que buscan promulgar la adopción de un nuevo protocolo de autenticación digital con el que comerciantes y bancos podrán garantizar que los compradores en línea sean quienes dicen ser. La empresa desarrolló un sistema de detección de fraude basado en la inteligencia artificial, diseñado para medir el nivel de riesgo de una transacción y ayudar a las instituciones a aumentar la precisión de las aprobaciones de pago.
“El consumidor se identifica de manera automática e inteligente. La inteligencia artificial conecta información que arroja la interacción digital como el número de serie del dispositivo, la dirección de IP, el tipo de browser y la conexión, Además, estudia la manera en que el usuario sostiene el dispositivo, en qué ángulo, como teclea, si es derecho o zurdo, cuál es su tasa de error para identificar si es el usuario o no”, explicó.
Esta información crea un perfil del comportamiento del cliente que le facilita a los comercios e instituciones financieras el proceso de identificación. Si en efecto es la persona, la compra procede automáticamente. En caso de que se detecte una discordancia con la información le pedirá al usuario contestar unas preguntas.
FUENTE: elvocero.com
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