Después de seis años de matrimonio y dos hijos juntos, Ricky Martiny Jwan Yosef sorprendieron al mundo entero al anunciar su separación y su inminente divorcio. La pareja era considerada como una de las más solidas del mundo del espectáculo y la comunidad LGBT+, sin embargo, a través de sus redes sociales, dieron a conocer el fin de su historia de amor y aseguraron que la decisión había sido mutua.
El cantante y el artista plástico explicaron que mantendrán una amistad cercana por el bienestar de sus pequeños y dejaron claro que se encuentran bien y en paz en estos momentos de su vida: “Luego de una cuidadosa reflexión, hemos decidido poner fin a nuestro matrimonio con amor, respeto y dignidad hacia nosotros y nuestros hijos”, escribieron.
Sin embargo, ninguno de los habló sobre las motivos que los habrían llevado a separarse; sin embargo, quien sí habló al respecto una fuente cercana a la todavía pareja, quien aclaró que la ruptura no fue ocasionada por un tercero en discordia, como llegó a especularse, sino por supuestos acuerdos que ambos tenían y que aparentemente dejaron de funcionar en su relación.
La fuente, quien prefirió mantenerse en el anonimato, detalló al Daily Mail que el intérprete de “La vida loca” habría mantenido un matrimonio abierto; es decir, que tanto él como Yosef tenían permitido relacionarse físicamente con otras personas, y aunque por mucho tiempo esta situación les iba de maravilla, llegó el momento en que dejó de hacerlo: “Al igual que muchas parejas, Ricky y Jwan tuvieron una relación abierta durante la mayor parte de su matrimonio. Esto funcionó para ellos, hasta que dejó de hacerlo”, dijo al diario británico.
Ricky y Jwan iniciaron su relación en 2015 y un año más tarde ya estaban comprometidos; la boda se realizó en 2017, antes de darle la bienvenida a Lucia y Renn, los dos pequeños que comparten.
FUENTE: elnuevodia.com