Las operaciones de campo de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, siglas en inglés) para los terremotos de Puerto Rico quedan suspendidas hasta el 30 de marzo, aunque el personal continúa sus labores en la isla para brindar apoyo a los damnificados.
FEMA apoyará a la gobernadora Wanda Vázquez, quien emitió el domingo una orden ejecutiva que suspende todas las operaciones gubernamentales y comerciales no esenciales en la isla.
A partir de ayer, FEMA cerró todos los centros de recuperación por desastre y ha suspendido las visitas de los especialistas en mitigación de FEMA a las tiendas tales como Home Depot y las ferreterías National Lumber.
Además, los equipos de asistencia a sobrevivientes del desastre han suspendido sus labores de evaluación a los municipios que fueron aprobados para recibir asistencia y los evaluadores de vivienda han cesado todas las visitas a viviendas afectadas por los terremotos.