Según el Departamento de Trabajo, el índice de precios al consumidor subió un 5.4% en septiembre respecto al año anterior, un aumento ligeramente por encima del alza de 5.3% de agosto e igualando los aumentos en junio y julio, que fueron los más altos desde el año 2008.
Este repunte de la inflación se refleja en los precios de productos básicos, vehículos, materias primas, viviendas y energía, entre otros.
Factores que han provocado este aumento de precios son la escasez de insumos por la pandemia y la gran cantidad de ayudas económicas por parte del gobierno lo cual ha desembocado en la falta de mano de obra.
Además, las cadenas de suministro para la producción y la entrega de productos se han detenido en muchos lugares por problemas logísticos.
Los especialistas pronostican meses muy duros y una Navidad mucho más costosa que años anteriores.
FUENTE: Adriana Navarro | americateve.com