Los problemas de telecomunicaciones que enfrenta el país, así como la falta de energía eléctrica en más de la mitad de las escuelas públicas, han provocado atrasos en el pago de algunas compensaciones a empleados y problemas administrativos en el Departamento de Educación.
Por un lado, la agencia aún no ha pagado a decenas de maestros la bonificación que se les prometió por trabajar más allá del horario lectivo en las escuelas que no tenían servicio de energía eléctrica el semestre pasado y que operaron mediodía.
La secretaria de Educación, Julia Keleher, reconoció el atraso en los pagos, pero aseguró que se debe a que la agencia aún no sabe a quiénes debe pagarle.
“En diciembre se le pidió a los supervisores que enviaran la información de quiénes se han quedado en las escuelas después del mediodía, pero aún no se tiene toda la información”, aseguró Keleher. Tan solo dos directores escolares han enviado los datos solicitados a través del formulario que creó la agencia para dar la remuneración especial.
La presidenta de la Federación de Maestros, Mercedes Martínez, denunció el domingo que la agencia ha incumplido con estos pagos a los docentes, un factor que se une a otras situaciones que, aseguran, atentan contra la educación pública en este inicio de semestre.
Por otro lado, la falta de luz en las escuelas ha obligado a los empleados a registrar su asistencia diaria en formularios en papel, pero los documentos están llegando al nivel central sin la firma del supervisor, necesaria para que el personal cobre su salario, reveló Keleher.
Al momento, este problema en la cadena de supervisión de Educación no ha causado interrupciones en los pagos de nómina de personal docente y no docente. Pero la secretaria adelantó que no descarta ordenar que se detenga el depósito directo de los empleados cuyas solicitudes de ajustes y licencias en el Sistema de Tiempo, Asistencia y Licencia (TAL) -conocidas como DE-14- no estén autorizadas por sus supervisores.
“Ya sabemos quiénes son los supervisores y se le enviaron cartas. Lo que podemos hacer es detener los cheques, los depósitos directos. Los empleados tendrían que venir (a las oficinas centrales) a buscar su cheque, pero necesitamos tomar acciones correctivas”, expresó Keleher.
La secretaria destacó que recibir las hojas de asistencia sin la firma del supervisor es un problema que se había reportado antes, pero en la mayoría de los casos no se identificaban a tiempo porquelos depósitos de los empleados -particularmente, de los maestros- se emiten de forma automática.
FUENTE: elnuevodia.com