La Cámara de Representantes se presta aprobar en la sesión de hoy una medida de la autoría del representante José Aponte Hernández, la cual busca investigar la proliferación en las transacciones de la venta de automóviles a través de personas que se hacen llamar brokers sin poseer licencia para ello y sin la autorización de la institución que financia la unidad.
Se trata de la Resolución 321, la cual también ordena a la Comisión de Asuntos del Consumidor, Banca y Seguros de la Cámara baja evaluar alternativas para atender esta situación.
Según expresó Aponte Hernández en la exposición de motivos de la pieza legislativa, “la difícil situación económica que enfrentan los puertorriqueños ha llevado a muchos a vender o ceder las cuentas de auto a personas que se hacen llamar brokers, sin poseer licencia para ello o que no cumplen con el proceso dispuesto en ley. Luego de realizada la transacción, se topan con que la cuenta no fue saldada, ni se cambió el nombre del título del vehículo, ya que no se solicitó la autorización de la institución que lo financia. En algunos casos, los supuestos brokers utilizan contratos para aparentar a la persona que todo está en orden y que la venta es legal. En otras ocasiones, los autos cedidos son utilizados por cometer delitos”.
Se estima que, en este esquema, los llamados brokers podrían ganar hasta $10,000 por transacción.