SAN JUAN (CyberNews) – Una investigación confidencial realizada por el Negociado de la Policía y el Departamento de Justicia culminó en la madrugada del jueves, con el arresto de 18 personas y la presentación de 75 cargos criminales a los miembros de cuatro gangas dedicadas al robo de auto a mano armada (carjacking), hurto de vehículos y trasiego de armas que operaban en diez municipios de la Isla.
“Estos individuos se apropiaban de forma violenta de los bienes de los ciudadanos y estuvieron eludiendo la ley por un tiempo. Pero el trabajo conjunto y estratégico de los fiscales de la División de Crimen Organizado y los agentes de la Policía logró detener a estos grupos que han hecho de la delincuencia una profesión. Tras una investigación amplia, contamos con la prueba para procesarlos más allá de duda razonable. Llegó el momento de que respondan por sus delitos ante la justicia”, expresó el secretario de Justicia, Domingo Emanuelli Hernández en conferencia de prensa.
Los cargos fueron presentados por las fiscales Diannete Aymat Frías y Liza Morales Jusino, de la División para Combatir el Crimen Organizado y las Drogas del Departamento de Justicia, en los centros judiciales de San Juan y Bayamón, donde se les fijaron a los imputados fianzas globales por la suma de 5,775,000 dólares. Además, la procuradora para Asuntos de Menores de San Juan, Ivelisse Maldonado Muñoz, presentó una falta contra un menor de edad, contra quien pesa una orden de aprehensión.
La investigación, encabezada por la División de Vehículos Hurtados de la Policía y la División para Combatir el Crimen Organizado y las Drogas de Justicia, duró cerca de dos años y resultó en la identificación de cuatro organizaciones criminales responsables de carjackings y gran parte de los vehículos hurtados en diez municipios, así como de sus respectivos líderes, los cuales fueron arrestados. Los detenidos tienen entre 17 y 51 años. En la redada también fueron ocupados seis rifles y 12 pistolas y se recuperaron 15 vehículos reportados como hurtados o mediante carjacking, que eran empleados para cometer delitos. Además, en el proceso de diligenciamiento de las órdenes de arresto, se ocuparon cinco autos, se incautaron cargadores, municiones y diferentes sustancias controladas para la distribución, que incluyen cocaína, heroína y marihuana.
Entretanto, el agente especial a cargo del Negociado federal de Investigaciones, Joseph González mencionó que “muchas veces recibimos de parte de ustedes la prensa. La pregunta sobre el tema de la jurisdicción, mi contestación siempre ha sido que vamos a trabajar mano a mano, apoyándonos para asegurarnos que estos criminales cumplan por sus delitos, no importa la jurisdicción. Por eso estamos aquí hoy apoyando a los compañeros de la policía de Puerto Rico. Ustedes saben que nuestra relación con la policía es excelente. Y siempre puede contar con nosotros en la FBI para seguir luchando contra los crímenes violentos”.
El otro grupo, que operaba en las zonas de San Juan, Toa Alta y Bayamón era dirigido por Pedro Cebollero Reyes (alias Pito), quien se desempeñaba como suplidor de piezas para junkers y hojalateros, entre otros y de venta de armas de fuego. Esta es la segunda vez que la división de Vehículos Hurtados de la Policía lo captura en un operativo, exactamente a esta misma fecha en 2020. La primera vez, fue objeto de un seguimiento policíaco en el área de Bayamón. Este cumplió una sentencia en probatoria precisamente por este mismo tipo de delito, relacionado a vehículos hurtados.
El tercer grupo criminal, que operaba en Vega Alta, Dorado, Vega Baja y Corozal, tenía como líderes a Jonathan Solís Pacheco (alias Gago) y Elvin Millet Torres (alias Flaco). Solís Pacheco mantenía el control de las transacciones de armas de fuego y de vehículos hurtados en el área de Vega Alta. Mientras, que Millet Torres era el suplidor y facilitador de armas de fuego de la misma zona.
Mientras, que el cuarto grupo estaba liderado por Eliut Córdova Morales y se dedicaba a la venta de armas ilícitas y vehículos hurtados en Vega Baja y Corozal.
Los otros 12 individuos, contra los que se radicaron cargos, pertenecen a estas cuatro organizaciones.
En la zona de Aibonito fueron arrestados otros individuos que operaban de forma independiente. Estos son Diego Meléndez Febo, comerciante de venta de pinchos, quien, además, operaba un punto de ventas armas y droga y Miguel Mejías Basco, quien fungía como guardia de seguridad para una compañía privada que presta vigilancia a una oficina de servicios gubernamentales en Barranquitas, mientras ofrecía sus servicios ilícitos para proveer licencias de conducir y de vehículos. A estos se sumó, John Rondón Díaz, dedicado a suplir armas de fuego a organizaciones criminales de Bayamón y Vega Alta.
El director del Negociado de Vehículos Hurtados de la Policía, Gerardo Oliver Franco ofreció detalles de la investigación de este caso.
“Esta investigación es la culminación de 2 años de trabajo del negociado de investigaciones de vehículos hurtados, donde se logra desarticular cuatro organizaciones altamente peligrosas. Organizaciones que se dedicaban no solo al hurto de vehículos hurtados, sino también a los carjackings. Dentro de estas organizaciones se encontraba una fémina, la cual lideraba una organización el área de Juncos, Caguas, San Lorenzo. Esta era una líder que cometía carjackings con su grupo. Tenía una probatoria federal por este mismo tipo de delito. También era una persona que se dedicaba al trasiego de armas de fuego, sumamente potentes”, mencionó.
Explicó que las 4 organizaciones tenían vínculos. Por ejemplo, compartían los vehículos robados para cometer delitos en las otras áreas.
Con relación a los delitos de carjacking, las estadísticas del Negociado de la Policía de Puerto Rico, reflejan una reducción de 22 casos menos que a la misma fecha el año pasado.
En específico las denuncias son por infracciones al artículo 15 de la Ley para la Protección de la Propiedad Vehicular. Asimismo, por infracciones a los artículos 6.02, 6.05, 6.09, 6.22 y 6.12, que corresponden a la venta y distribución ilegal de armas de fuego, portación y transportación ilegal de armas de fuego sin licencia; portación, posesión ilegal de armas largas y por el distribución, posesión y venta ilegal de municiones, remoción o mutilación de número de serie en un arma de fuego bajo la Ley de Armas de Puerto Rico de 2020, respectivamente. También se presentó una denuncia por infracción al artículo 192 del Código Penal de Puerto Rico, el cual prohíbe el recibo, disposición y transportación de bienes objeto de delito.
FUENTE: cybernews