El gobernador Pedro Pierluisi aseguró este lunes que la próxima orden ejecutiva sobre el COVID-19 contendrá cambios sustanciales para, según él, armonizar el reclamo de quienes persiguen mantener o aumentar las restricciones vigentes y quienes buscan flexibilizaciones.
Indicó que la nueva orden ejecutiva tendrá una vigencia de, al menos, tres semanas, pero subrayó que tendrá la potestad para realizar cambios en caso de que los contagios aumenten o la capacidad de los hospitales esté amenazada.
De acuerdo con los datos del Departamento de Salud, Puerto Rico añadió hoy 10 muertes y 412 casos positivos confirmados por COVID-19, mientras que la cantidad de hospitalizados a causa del virus aumentó a 421, lo que se traduce en seis más que ayer.
“Tendremos una orden ejecutiva a partir del 8 de enero. La orden vigente vence el 7 de enero y yo lo que voy a buscar en es ser justo y razonable y atender los reclamos de todos los sectores, obviamente teniendo la salud como primera prioridad. Pero voy velar porque la orden sea justa, no sea arbitraria y que cuando se exigen cierres u horarios particulares para negocios se hace porque se ha detectado un nivel alto de contagio en ese tipo de negocios”, explicó en entrevista radial (WKAQ - 580).
“Algunos dicen que ’no tiene la toda la información, así que no es momento de hacer cambios’. Veo algunos hablando de que ’no, es que no han llegado resultados de la última semana’ y otros dicen ’esto no pare más, abre y ya’. Pues yo voy a buscar la manera de conciliar esas dos posiciones por el bien de Puerto Rico. No va a ser ni una ni la otra. Que no piensen que meramente me voy a quedar paralizado y no va a haber cambio alguno, seguro que vienen cambios. Ahora, lo voy a hacer de una forma mesurada y bien pensada”, ripostó el gobernador que entró al cargo el pasado sábado, 2 de enero.
“No quiero hacer más de lo mismo porque lo importante aquí es que no nos podemos paralizar. Tenemos que salir adelante protegiendo la salud del pueblo, pero a la misma vez velando por el bienestar general de nuestra población”, añadió.
La orden ejecutiva vigente dispone, entre otras cosas, un toque de queda de 9:00 p.m. a 5:00 .m. y un “lockdown” los domingos. Asimismo, establece el cierre de las playas, chinchorros, barras y discotecas. La orden también obliga a los restaurantes y comercios cerrados a operar a un 30% de su capacidad.
FUENTE: elnuevodia.com