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De ahora en adelante, el gobierno no ofrecerá licencias para instituciones de salud a menos que garanticen que no ofrecerán las llamadas terapias de conversión.
Así lo establece la orden ejecutiva firmada ayer por el gobernador Ricardo Rosselló. Con esta orden, el gobernador pretende prohibir una práctica que, según él mismo ha dicho, carece de base científica.
La orden ejecutiva establece que, a la hora de conceder o renovar una licencia para operar instalaciones de salud públicas o privadas, los departamentos de Salud, Desarrollo Económico y Comercio y la Administración de Servicios de Salud Mental y Contra la Adicción (ASSMCA) exigirán un certificado garantizando que en estos lugares no se brindarán las terapias de conversión.
Estas denominadas terapias de conversión son utilizadas con el pretexto de cambiar la orientación sexual de una persona. En la Legislatura se discutió un proyecto de la senadora Zoé Laboy (PS 1000) que buscaba prohibir estas prácticas. El proyecto fue aprobado en el Senado, no así en la Cámara donde no pasó del Comité de lo Jurídico que preside María Milagros Charbonier.
“Nos comprometimos a continuar impulsando iniciativas para proteger los derechos civiles de todas las personas y a dirigir toda acción gubernamental para promover la equidad e igualdad humana”, dijo.
FUENTE: elvocero.com
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