Michael Stevens, encargado de las finanzas monárquicas, ha escrito al primer ministro británico, el conservador Rishi Sunak, y al de Economía, Jeremy Hunt, para pedir que "se reduzca apropiadamente" esa cantidad, que se nutre de los beneficios de la explotación de las históricas propiedades y tierras reales, que desde el siglo XVIII administra el Estado.
A cambio, el rey de turno recibe una subvención que es actualmente del 25 % del rendimiento de ese "Crown State" (bienes de la corona), lo que se cifró el año pasado en 86,3 millones de libras (984 millones de euros).
La gestora del Crown State ha anunciado hoy un acuerdo para que algunas de sus tierras se utilicen para seis nuevos parques eólicos marinos en varias partes del Reino Unido, lo que se calcula que reportará un beneficio anual de 1.000 millones de libras (1.140 millones de euros) durante al menos tres años.
Carlos III propone reducir la proporción de estos nuevos ingresos que vayan a parar a la Subvención real -de modo que buena parte se los quede el Estado-, lo que seguramente se reflejará en la cantidad que reciba en el ejercicio 2024-25.