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Según publica el portal Diario de Cuba, el Gobierno cubano dio luz verde a la entrada de productos alimenticios procedentes de Rusia, en medio de una escasez generalizada y la inflación que golpea la dieta de los cubanos.
"El Centro Nacional de Sanidad Animal del Ministerio de Agricultura de la República de Cuba extendió, bajo las garantías de Rosseljoznadzor (Servicio Federal ruso de Control Veterinario y Fitosanitario), las acreditaciones emitidas a 14 empresas rusas que habían pasado previamente inspecciones por la parte cubana", indicó un comunicado citado por el medio estatal Sputnik.
En específico, La Habana "amplió las acreditaciones a tres empresas productoras de carne de aves, tres de productos cárnicos, tres de carne de cerdo, dos organizaciones procesadoras de lácteos, una de producción de carne vacuna, una para alimentos de origen vegetal y a una fábrica de conservas de pescado".
Según Sputnik, a mediados de mayo Rosseljoznadzor planteó a las autoridades cubanas el tema de retomar la certificación de las empresas de Rusia de lácteos y carnes previamente inspeccionadas por La Habana bajo las garantías del regulador ruso.
Cítrico Arimao facturó durante 2022 casi ocho millones de pesos (900.000 de ellos en dólares) por las ventas de mango, carbón vegetal, chile habanero y la hoja de piña. Este último producto también fue exportado a Rusia.
No está claro cuál será el destino de los productos alimenticios rusos en un país donde comprar pollo congelado importado, de Brasil o de Estados Unidos, por solo citar un ejemplo, cuesta hasta 3.600 pesos el paquete, cuando aparece. El salario medio en Cuba ronda entre los 3.000 y 4.000 pesos. Una persona con pensión recibe poco más de 1.500 pesos.
Rusia envió durante la pandemia y en momentos de crisis por las protestas antigubernamentales enlatados y otros productos con los que el Gobierno conformó módulos para más de tres millones de familias en un intento de aplacar el malestar.
FUENTE: diariodecuba.com
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